EDUCACIÓN INCLUSIVA

La educación inclusiva es un modelo basado en la valoración de la diversidad de los alumnos considerando especialmente aquellos casos en los que puede existir un riesgo de exclusión social y transformarlo en un elemento enriquecedor dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje y beneficioso para el desarrollo del ser humano. En definitiva, no es un método dónde solo se preste atención a las personas con discapacidades sino a todo el alumnado sin distinguirlos por raza, condición social, cultura o religión entre otros aspectos.

Las principales características que tiene este modelo a diferencia del modelo tradicional son: 

• Es un enfoque dónde se basa en analizar las características de cada estudiante para poder determinar los apoyos que necesita, en cambio la educación tradicional se basa en el diagnóstico de cada alumno y alumna para determinar una categoría y solucionar el déficit que pueda existir.

• Es un enfoque centrado en la actividad conjunta de la clase, mientras que el enfoque tradicional se basa en el estudiante.

Podemos decir que este enfoque no se basa en la realización de programas especiales para cada estudiante, sino que es en la misma aula donde, entre todos, responden a las necesidades de cada estudiante. Según la UNESCO, entiende que la educación inclusiva, los alumnos y alumnas con necesidades especiales deben tener acceso a los colegios de educación regular teniendo las mismas oportunidades que sus compañeros de clase.

Los principales objetivos que persigue este tipo de educación son: 

1. La inclusión social y académica del alumnado puesto que se trata de incluir a los alumnos y alumnas.
2. Creación de un sistema único donde no existan programas especiales para los alumnos y alumnas con determinadas necesidades.
3. La atención a todos los componentes de la clase en función de sus características.
4. Impulsar la igualdad de oportunidades a través de la solidaridad y la participación.
5. Coordinación entre todos los participantes del sistema educativo, es decir, los profesores, padres, alumnos, asociaciones, etc.
6. Promover la inclusión en todos lo ámbitos sociales y laborales.

Gracias a esta metodología, los niños y niñas que componen la clase adquieren múltiples beneficio que la educación tradicional no transmite. Gracias a la educación inclusiva, podemos hacer que el alumnado adquiera una interacción social entre todos los componentes de la clase sin importar sus diferencias y diversidades, creando así una sociedad más solidara y empática. También se encarga de fomentar el aprendizaje en valores y en ponerse en el lugar del otro con más facilidad aumentando la sensación de unión de grupo. Además, hace que aumente el nivel de autoestima y el compromiso social. 

Para conseguir este cambio educativo dentro de las aulas, debemos enfocar las cosas de otras manera, es decir, este cambio requiere un esfuerzo que muchos no hacen. por ello encontramos una serie de contras hacia esta educación inclusiva:

• Creencias erróneas de la mayoría de las personas que dificultan la integración de las personas con diversidad funciona o de culturas diferentes entre otras.

• Nos encontramos con barreras físicas, puesto que algunas escuelas no están todavía preparadas para el acceso de personas con discapacidad.

• El profesorado no está lo suficientemente preparado y formado para hacer frente a la diversidad que se pueda dar dentro del aula.

• La falta de financiación imposibilita a las escuelas la adaptación de los recursos necesarios para los alumnos que lo necesiten.

• Un sistema legislativo donde deja de lado a muchos alumnos haciendo que estos queden fuera del sistema educativo.

Para poder trabajar la educación inclusiva, necesitamos saber que debemos de tener en cuenta en nuestras aulas inclusivas para el buen funcionamiento de este sistema por ello es necesario:

• Conocer a los alumnos y alumnos. Todo el profesorado debe tomar el tiempo necesario para conocer a su alumnado considerando a cada personas como un individuo con sus particularidades, para ello es bueno el uso de juegos, preguntas y la observación.

• Fomentar el uso de actividades de pensamiento crítico, de forma que os alumnos y alumnas se planteen problemas y soluciones, con el objetivo de que todos los alumnos intervengan.

• Evaluaciones diferentes considerando cada particularidad de cada niño o niña.

• Apostar por dar la iniciativa de las actividades que se realicen en el aula a los propios alumnos y alumnas, de forma que sean ellos mimos los que dirijan su propio aprendizaje.

En mi opinión, deberíamos centrarnos en cambiar nuestra visión y hacer ver que todos somos iguales y tenemos los mimos derechos hacia una educación igualitaria para todos son necesidad de excluir a ninguna persona ya sea por su cultura, religión o por sus diversidades funcionales. Es importante hacer ver que entre todos podemos conseguir una educación mejor, ayudándonos, respetándonos y colaborando conjuntamente para tener un buen desarrollo individual y colectivo para nuestra vida. No podemos etiquetar a nadie y excluir, debemos escuchar y hacer entre todos un mundo más unido y así conseguiremos entre todos un mundo mejor.